"Todavía te sientes noble, y noble te sienten todavía también los otros,(...) Debes saber que alguien noble es un obstáculo en su camino. También para los buenos un noble es un obstáculo, y aunque lo llamen bueno, lo que quieren es hacerlo a un lado. El noble quiere crear cosas nuevas y una nueva virtud. El bueno quiere las cosas viejas, y que se conserven. Pero el peligro del noble no es volverse bueno, sino insolente, burlón, destructor. ¡Ay!, he conocido nobles que perdieron su más alta esperanza. Y luego calumniaron todas las esperanzas dignas. Desde entonces han vivido insolentemente en medio de breves placeres, y apenas se trazaron metas de más de un día. 'El espíritu también es voluptuosidad', así dijeron. Y entonces se le quebraron las alas a su espíritu (...) En otro tiempo pensaron convertirse en héroes, ahora son libertinos. Pero por amor y esperanza te suplico que no deseches al héroe que hay en tu alma. ¡Ten en alto el estandarte de tu más alta esperanza!"



f.n.